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Re-significando los comienzos

 

Es común que con el cambio de dígito anual tomemos un momento para pensar en nuestros avances y metas, esto nos ayuda a calibrar los retos por venir. Para muchas personas esto funciona, para otras el cambio de año puede no tener gran significado. Sin embargo, no queríamos dejar pasar la fecha para hablar de los cambios, los comienzos y los significados.  

Estar consciente de que vivimos por ciclos nos ayuda a saber que eventualmente las condiciones pueden cambiar, nada permanece estático, nuestro trabajo, familia, habilidades, pueden modificarse a veces con el tiempo, producto de nuestro esfuerzo y otras por causas externas a nosotros.

En los últimos artículos hemos abordado la necesidad de la transformación, en particular, de la transformación digital frente al nuevo panorama mundial; como hemos dicho, no solo es una cuestión de adaptarnos o utilizar más tecnología, se trata de que seamos capaces de identificar la necesidad de sumarnos a los cambios y de tener claras nuestras motivaciones y expectativas frente al cambio.

Para generar reflexión ante nuevos panoramas te sugerimos responder las siguientes preguntas:

  1. ¿Estoy consciente de que las cosas pueden cambiar? La respuesta puede ser obvia, pero en ocasiones nos sentimos muy seguros de las circunstancias, tomar consciencia de este cambio no implica que tienes que vivir en constante incertidumbre, pero sí saber que las circunstancias pueden cambiar, en ocasiones incluso tener planes de emergencia.
  2. ¿Cómo reaccionas al cambio? Analiza qué tanto te conoces y cómo has reaccionado históricamente cuando las cosas cambian, qué emociones tienes y qué tan rápido te adaptas a las nuevas situaciones.
  3. ¿Qué representa el cambio para mí? Reflexiona sobre si la mayoría de los cambios que has enfrentado son positivos o negativos, así puedes darte cuenta si te sientes retado o amenazado; ninguna de las dos emociones es mala, pero pueden predisponer tu actitud frente a lo desconocido y es importante reconocerlo.

Estas primeras preguntas te ayudarán a identificar cómo reaccionas cuando las situaciones se transforman, esto te permitirá tomar acciones si quieres modificarlo, o al menos ser consciente de por qué te comportas de la forma en que lo haces cuando algo cambia.

El cambio tiene cuatro etapas: negación (no creer lo que está pasando), resistencia (creer que es posible permanecer igual o ignorar el cambio), exploración (se reconoce la situación y se comienza a explorar sobre ella) y compromiso (se acepta el cambio y se adaptan los comportamientos necesarios.

La adaptación tiene lugar cuando somos capaces de ajustar nuestros recursos personales y materiales a las circunstancias actuales, esto nos permite seguir adelante ante cualquier circunstancia y tiene un gran valor evolutivo. Adaptarte te permite aprender, desarrollar la capacidad de adaptación; te será posible cuando seas capaz de identificar cómo te relacionas con los cambios y qué conductas tomas frente a ellos; una vez que lo haces consciente el siguiente paso es tomar acción: para aprender a adaptarte te sugerimos:

 

  1. Analiza las emociones que te produce el cambio.
  2. Conoce tus recursos, valora las habilidades que tienes, si te reconoces como suficiente en ellas entonces podrás adaptarlas a diferentes circunstancias.
  3. Ejercita tu curiosidad, es muy fácil apegarse a lo que sabemos y a nuestra idea de cómo creemos que debería ser el mundo, pero mientras más abierto estés a conocer otras realidades, más sencillo será que te adaptes.
  4. Juega y práctica, cuando somos niños aprendemos jugando, trata de no perder esa costumbre, si tienes un nuevo teléfono juega con él, elimina cosas, descarga otras, explora todas sus funciones, incluso puedes explorar las funciones y atajos que no sabías que tenía el software que más utilizas en tu trabajo, buscar softwares con funciones similares, etc.
  5. Pide ayuda, cuando enfrentamos un cambio es importante tener soporte, puede ser algo muy sencillo, desde un compañero que te ayude con algo que no sabías cómo hacer, hasta las personas que están contigo cuando necesitas apoyo.

Al conocer  tus reacciones emocionales, tu forma de pensar y adaptarte, será más sencillo que puedas analizar cualquier cambio para identificar lo que te funciona y enfocarte en ello, esto te ayudará a resignificar los cambios como retos que se presentan porque son parte de la vida, sabiendo que cuentas con las herramientas suficientes para enfrentarlos, o bien que necesitas pedir ayuda para adaptarte a cierta situación.

Así, el cambio se convierte en una herramienta de crecimiento, recuerda que esto no elimina los sentimientos, puedes seguir sintiendo tristeza o miedo ante el cambio, pero tu forma de manejarlo será diferente.

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